La doble nacionalidad italiana del presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha pasado de ser una curiosidad biográfica a convertirse en un nuevo frente de controversia política. La tensión se ha disparado a raíz de sus recientes declaraciones internacionales y el posterior retiro de su visa estadounidense.
Una solicitud formal ha sido presentada ante el Gobierno de Italia pidiendo la revocatoria de la ciudadanía del mandatario colombiano, argumentando que sus acciones y posturas públicas contravienen los principios democráticos y los valores de la República Italiana y de la Unión Europea.
El Origen de la Solicitud
La petición ha sido impulsada por figuras de la oposición colombiana. Uno de los promotores más destacados de esta iniciativa ha sido Daniel Palacios, exministro del Interior.
Las razones esgrimidas para la solicitud de retiro de la nacionalidad se centran en varios puntos:
- Discurso y Postura Internacional: Se alega que las declaraciones “agresivas y desestabilizadoras” de Petro en escenarios internacionales, particularmente sus duras críticas a la política exterior de Estados Unidos y sus comparaciones en la Asamblea General de la ONU, son impropias de un ciudadano europeo que debe adherirse a los principios de las alianzas occidentales.
- Instrumentalización de la Ciudadanía: El debate se intensificó después de que el Gobierno de Estados Unidos revocara el visado de Petro. El presidente colombiano respondió públicamente que la cancelación de la visa no le afectaba, ya que, como ciudadano europeo (italiano), puede ingresar a Estados Unidos con un simple permiso ESTA bajo el Programa de Exención de Visa. Los críticos sostienen que este uso de la ciudadanía italiana para sortear una sanción diplomática es un acto de “burla” a las relaciones bilaterales.
- Contradicción con Principios Democráticos: La solicitud argumenta que las supuestas “tendencias autocráticas” y el constante “ataque a las instituciones” que la oposición le achaca en Colombia son incompatibles con los valores democráticos y de libertad defendidos por Italia.
La Posición del Presidente Petro: Una “Persona Libre en el Mundo”
Gustavo Petro, quien obtuvo la nacionalidad italiana por ascendencia (su familia proviene de la región de Campania), ha utilizado su condición de ciudadano europeo como una herramienta retórica.
- Tras el retiro de su visa estadounidense, Petro afirmó en redes sociales: “Ya no tengo visa para viajar a EE. UU. No me importa. No necesito Visa sino ESTA, por que no solo soy ciudadano colombiano sino ciudadano europeo“.
- En el pasado, incluso llegó a amenazar con renunciar él mismo a su ciudadanía italiana si Italia continuaba apoyando acciones militares en ciertas zonas de conflicto internacional, declarando que prefiere ser “ciudadano de las tierras libres”.
¿Es Viable la Revocatoria de la Ciudadanía Italiana?
La legislación italiana contempla la posibilidad de revocar la ciudadanía, pero es un proceso extremadamente raro y complejo, especialmente cuando se trata de figuras políticas de alto nivel que la obtuvieron por descendencia (iure sanguinis).
- La revocatoria suele aplicarse en casos de terrorismo, crímenes de guerra, o por haber servido en las fuerzas armadas de un país enemigo sin permiso, o por haber cometido graves delitos en Italia.
- En este caso, la solicitud tiene un alto componente político y diplomático. El Gobierno de Giorgia Meloni, que lidera el actual Ejecutivo italiano, es de corte conservador, pero la decisión de retirar la nacionalidad a un jefe de Estado electo, por motivos que esencialmente son disputas de política exterior colombiana, representaría un precedente diplomático significativo.
La pelota queda ahora en el tejado de las autoridades italianas, quienes deben evaluar si el comportamiento público del presidente colombiano constituye una violación de la lealtad a la República lo suficientemente grave como para justificar una acción de esta magnitud.