Se ha generado un notable revuelo en los últimos días debido a las afirmaciones de YoungHoon Kim, un surcoreano reconocido por poseer uno de los coeficientes intelectuales más altos del mundo (se le atribuye un CI de 276). Kim, quien es presidente y fundador de la United Sigma Intelligence Association (USIA), ha declarado públicamente que Jesucristo regresará pronto, específicamente “en esta generación”.
¿Quién es YoungHoon Kim y por qué sus declaraciones generan impacto?
YoungHoon Kim es una figura que combina una impresionante capacidad intelectual con una formación académica diversa. Además de su excepcional coeficiente intelectual, validado por sociedades como GIGA, Mensa y Mega Society, cuenta con un doctorado en Neurociencia Clínica y una licenciatura en Teología por la Universidad de Yonsei.
Su relevancia en el ámbito intelectual se ve reforzada por la composición de la USIA, su organización, que agrupa a destacadas figuras del mundo académico y científico, incluyendo a siete premios Nobel y pensadores de la talla de Noam Chomsky, Yuval Harari y Richard Dawkins. Esta conjunción de credenciales académicas y su posición en la comunidad científica hacen que sus afirmaciones, incluso las de índole religiosa, sean objeto de amplia atención y debate.
Las afirmaciones de YoungHoon Kim sobre el regreso de Jesús
Kim ha manifestado su convicción en la inminente segunda venida de Jesucristo, basándose en lo que él describe como un cálculo y no una adivinanza. Ha enfatizado que sus predicciones no son simplemente una cuestión de fe religiosa, sino que se apoyan en su inteligencia y en su interpretación de lo que él considera la Palabra de Dios: la Biblia. Para Kim, la Biblia es “una ley inmutable” y “una guía perfecta para alcanzar la vida celestial” que no debe ser modificada ni actualizada.
Aunque no ha especificado una fecha exacta, Kim ha sugerido que este evento ocurrirá “en un plazo de entre 30 y 40 años”, afirmando que “sucederá antes de lo que muchos imaginan”. Sus argumentos se centran en la observación del estado actual del mundo, caracterizado por “mentiras y guerras”, un escenario que, según él, “no es visto con buenos ojos por parte de Dios”.